La conexión cándida-depresión
Hay una conexión entre la candidiasis y la depresión. Se trata de un hecho imaginable desde el momento en que existe conexión entre una enfermedad o dolor crónico y un estado mental depresivo.
Pero aparte de la imaginación, hay muchos expertos que han estudiado la relación entre la cándida, ese hongo que produce la candidiasis cuando se multiplica en el intestino, y la depresión o la salud mental en general.
Siguiendo a William Crook y su obra The Yeast Connection, las levaduras son organismos vivos unicelulares que no son ni animales ni vegetales. Viven en la superficie de todos los seres vivos, incluyendo frutas, verduras, cereales y piel. Son parte de los microflora (pequeñas plantas) y contribuyen de diversas maneras a la salud de su anfitrión. La levadura en sí misma es nutritiva y pequeñas cantidades de levadura le dan al pan un buen sabor. La levadura es un tipo de hongo. Moho, hongos, monilia y cándida son nombres que se usan para describir los diferentes tipos de levadura.
Una familia de levaduras, la cándida albicans, vive normalmente en los pliegues interiores cálidos y en las hendiduras del tracto digestivo y la vagina. Cuando el sistema inmunológico es fuerte, las levaduras cándida no causan problemas. Pero cuando se toman antibióticos de amplio espectro para enfermedades como el acné, las infecciones respiratorias o la cistitis (infección de la vejiga), estos fármacos noquean a los gérmenes amigables a la vez que dejan fuera de combate a los enemigos.
Las levaduras del género cándida no se ven afectadas por los antibióticos de modo que se multiplican y aumentan familias numerosas. Estas levaduras crean toxinas que debilitan el sistema inmunológico. Así que se pueden experimentar infecciones repetidas. Cada infección se trata con otra ronda de antibióticos, alentando un mayor crecimiento de los hongos, y un círculo vicioso.
Una dieta rica en azúcar y otros carbohidratos simples promueve el crecimiento excesivo de levadura.
Como podéis ver en este vídeo, muchas de las cosas que dice Crook coinciden con lo que explica con detalle el director de Biosalud Mariano Bueno
La expresión “yeast connection” o «conexión de la levadura» es un término para indicar la relación de las infecciones por hongos superficiales en el tracto digestivo (o la vagina) con la fatiga, dolor de cabeza, depresión, síndrome premenstrual, irritabilidad y otros síntomas que te pueden hacer sentir «enfermo en todas partes.»
Muchos de estos problemas se desarrollan porque el sistema inmunológico, el sistema endocrino y el cerebro están íntimamente relacionados.
La depresión
Millones de personas en el mundo sufren depresión. Muchas de esas personas han tomado Prozac, Zoloft y otros medicamentos. Estos medicamentos, como muchos otros, pueden causar reacciones adversas. Debido a esta posibilidad, muchos terapeutas dicen que estos fármacos no se deben suministrar a las personas sin buscar las causas físicas y psicológicas de la depresión.
Al igual que la fatiga, el dolor de cabeza, síndrome premenstrual y otras dolencias crónicas, la depresión puede tener muchas causas diferentes. Por otra parte, estas causas son con frecuencia múltiples. De acuerdo a nuestra experiencia, la cándida albicans ocupa un lugar destacado en esa lista de causas de la depresión, especialmente en mujeres de edades entre 25 y 45 años.
Si sufres una depresión o cualquier otro trastorno incapacitante y tienes una historia de tratamientos repetidos o prolongados de antibióticos, síntomas digestivos persistentes o infecciones vaginales recurrentes, infecciones de próstata, tiña inguinal o hongos en las uñas, un programa de tratamiento integral que cuente con medicamentos antimicóticos orales y una dieta especial pueden proporcionarte un alivio de esa depresión recurrente.
Uno de los principales síntomas de la proliferación de la cándida es la depresión. La depresión puede sentirse o ser descrita de varias maneras:
- Tristeza
- Falta de interés en las cosas que solían interesarte, emocionarte o ser importantes para ti
- Irritabilidad y negatividad: todo te molesta
- Incapacidad de sentir felicidad o placer, o incapacidad de sentir mucho de nada
- Pesimismo, desesperanza y ansiedad
- Temor por el futuro
La depresión tiende a abrirse camino poco a poco, por lo que es difícil determinar cuándo o cómo empezó. La persona deprimida se pregunta qué está causando esos sentimientos tristes persistentes. A veces la depresión está causada por un evento o situación traumática emocionalmente distinta, de la cual la persona casi siempre es consciente. Sin embargo, la depresión es muy común hoy en día, y en la mayoría de los casos la persona no tiene ni idea de lo que le está causando los sentimientos de tristeza y tiene miedo de buscar un tratamiento de su depresión En estos casos, el crecimiento excesivo de cándida es una causa. ¿Por qué?
La depresión es sin duda una anormalidad cerebral. Sin embargo, en la mayoría de los casos no hay nada realmente nocivo en el cerebro. Por el contrario, la impureza de la circulación que alimenta el cerebro es lo que está causando los síntomas
El tratamiento adecuado de la cándida es muy eficaz en el esclarecimiento de la depresión y la restauración de una perspectiva positiva en la vida de una persona. Se recuperan la esperanza y las razones para vivir. Estas mejoras se observan por lo general dentro de los primeros días de tratamiento de la cándida, y continúan a partir de ese momento.
La esquizofrenia
Respecto a la cándida y la salud mental, el doctor Carl Pfeiffer, uno de los pioneros en el tratamiento nutricional de los trastornos mentales, señaló en su libro Nutrición y enfermedad mental crónica que la infección por cándida es una de las causas menos conocidas de la esquizofrenia.
La esquizofrenia es un padecimiento mental con bases genéticas y según investigaciones recientes, existe un impacto genético de la microbiota intestinal en esta enfermedad mental.
Los microbios impactan en las funciones cognitivas y los patrones básicos de comportamiento, como la interacción social y el manejo del estrés.
El efecto de esta microbiota se extiende más allá del tubo digestivo, e influye en el desarrollo y funcionamiento del sistema nervioso central
El cerebro y el intestino están conectados directamente por el nervio vago.
El Clostridium difficile es una bacteria “mala”, de las más dañinas siguiendo el curso de los antibióticos.
El profesor Bernard Berthet, que es un experto bacteriólogo, sostiene que las bacterias intestinales patógenas, como la familia Clostridium, segregan neuro-toxinas, que producen numerosas enfermedades neurológicas. Para tratar estas enfermedades, debe recuperarse la flora intestinal. Pero lo innovador que propone el Prof. Berthet es que se haga simplemente con una dieta y probióticos, nada de antibióticos.
La idea del prof. Berthet es “matar de hambre” a las bacterias patógenas. Para ello, debe investigarse qué alimentos están alimentando a éstas bacterias.
El Dr. Mariano Bueno sigue la misma dirección en el caso de la candidiasis. Hay que “matar de hambre” a las cándidas y los gérmenes patógenos del intestino.
Para ello es fundamental hacer un buen diagnóstico, En Biosalud se realiza el FOODINT® (Test de intolerancias alimenticias), CANDITEST® (análisis de orina para detectar la existencia de infecciones intestinales) y KOPROCHECK® (estudio en heces de la flora intestinal y cultivo para bacterias y hongos intestinales)
Vemos pues con todas estas investigaciones la conexión entre una enfermedad como la candidiasis y la depresión o la enfermedad mental. El intestino y el cerebro están claramente conectados, por ello son muchos los médicos que llaman al intestino “el segundo cerebro”